Indicios que NO estas preparado para tener tu propia empresa

A pesar de todas las fotos que tengas en Instagram, no todo el mundo está destinado a ser un empresario. El emprendimiento puede conducir a una vida de autonomía y beneficiar a las personas que se rodean en nuestro entorno. Pero también puede ser un bocado de mal gusto si hay alguien que se considere que no está a la altura de la tarea. Ésta no es una opción que aplique para toda la gente.

• • Falta de motivación: El emprendimiento puede ser solitario a veces. Sin embargo, sólo obtienes de él lo que aportas. La habilidad de realizar cosas por tu cuenta propia es importante. Tienes que estar motivado para completar tareas, especialmente cuando no sientas ganas de hacerlo.Si eres el tipo de persona que necesita que un jefe le diga qué hacer, no estás listo.
  • Te alteras cuando estas presionado: El estrés de dirigir un negocio puede ser abrumador. Tendrás que hacer muchos trucos para manejar tu empresa y, al mismo tiempo, lidiar con la presión desde muchos ángulos. Si te desmoronas al encontrarte bajo una presión y estrés constante, piensa dos veces antes de decidir emprender.
  • No te sientes apasionado por el  negocio: La pasión no es suficiente para empezar un negocio, pero ciertamente, es una gran parte importante de la ecuación. Algunas veces, un negocio se siente como un empleo. Tu pasión es aquello que te recuerda lo que tienes; te empuja a seguir adelante. Si no sientes pasión por lo que haces, no estás listo para emprender.

Aconsejamos que seas honesto contigo mismo acerca de lo que quieres que tu vida sea. Pregúntate si emprender es realmente para ti, y si estás preparado para hacerlo. Es mejor construir tu sueño basado en un plan, y no hacer de tu sueño una pesadilla.