La compañía de investigación privada de software, Qualtrics, ha realizado un estudio junto a la firma de capital de riesgo Accel, en el que han descubierto que los usuarios cada vez están más enganchados a las redes sociales. La investigación se ha llevado a cabo en América del Norte, Reino Unido y Australia, donde se ha demostrado que la mayoría de los millennials no pasan más de cinco horas sin mirar alguna red social.
Concretamente, un 42% de los encuestados millennials reconocieron que no habían durado más de cinco horas sin comprobar sus aparatos, aunque hay que destacar que el tiempo dedicado a dormir fue excluido de la encuesta.
Además, como era de esperar, los millennials tienen un mayor vicio a los medios de comunicación social que el resto de generaciones. De hecho, tan solo el poco más de una cuarta parte de la Generación X (el 26%) aseguró no poder estar más de cinco horas sin conectarse, mientras que el 29% de los Baby Boomers dijo lo mismo.
¿Cómo es posible que los millennials tengan tanto tiempo libre como para estar conectados en todo momento al Facebook, Instagram o Snapchat? A eso el analista de eMarketer, Mark Dolliver, tiene una teoría: “Al analizar los datos sobre la cantidad de tiempo que pasan los millennials mirando las pantallas, nos damos cuenta de que tienden a retrasar determinadas cosas de la vida como casarse o tener hijos”.
Además, ha explicado que gran parte de las veces que se usa la red social es para ‘matar el tiempo’, un tiempo que a veces se alarga demasiado. El estudio también habla del gran estrés que ha provocado esta necesidad de estar conectado continuamente. De hecho, casi la mitad de la generación millennial estaba preocupada por cómo las redes sociales podrían afectar a su estado físico y mental.
